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Campaña Global ¡Alto a la Detención de Niñ@s Migrantes!

María, una niña de 12 años de El Salvador, tenía un sueño. Pero no era de estos sueños que las niñas de su edad suelen tener, como convertirse en bailarina o veterinaria, o tener un caballo o un perrito. María soñaba con volver a estar con su mamá y su papá, que habían migrado a Estados Unidos, mientras que ella y su hermano se quedaron bajo el cuidado de una tía. Así que salió de su comunidad para emprender el camino hacia el Norte y buscar a sus padres. Pero su sueño se convirtió en una pesadilla: una odisea de violencia y maltrato que culminó en su detención y repatriación. Ahora se encuentra otra vez en casa de su tía, pero no deja de soñar. A pesar de todo lo que vivió en su primer intento por cruzar, piensa irse otra vez.

La historia de María es ficticia pero se basa en testimonios de Niñas, Niños y Adolescentes (NNA) migrantes que recientemente han atestado las noticias. Según cifras de Amnistía Internacional y la Coalición Internacional contra la Detención este año, miles de niños, niñas y adolescentes fueron detenidos en México y Estados Unidos. Tan sólo en México, entre enero y septiembre, la cifra asciende a 17,322,el 47% de ellos (8,220) viajando sin compañía de sus padres o tutores. En Estados Unidos se alcanzó un máximo histórico de cerca de 50,000 aprehensiones entre octubre de 2013 y julio de 2014.

Para nadie es un secreto que la mayoría de estos NNA provienen de comunidades donde impera la pobreza y la violencia, y donde no hay acceso a la educación o a fuentes de trabajo dignas. En este contexto de violencia estructural, el riesgo de involucrarse en actividades delictivas asociadas al narcotráfico es muy elevado. Muchos niños, niñas y adolescentes son incluso perseguidos por pandillas y cárteles de drogas que buscan reclutarlos, extorsionarlos o sumarlos a las filas de explotación sexual y trabajo forzado. Ante esta dura realidad son los propios padres y madres quienes mandan a sus hijos solos en un peligroso viaje a Estados Unidos. Y mientras no se resuelvan estas causas de fondo, esto no cambiará.

Desde Fundar, Centro de Análisis e Investigación consideramos que es fundamental que los gobiernos de México y de Centroamérica analicen las causas que han provocado la migración irregular de NNA, buscando dar soluciones regionales, y que intenten dar respuesta a la necesidad de integración familiar y las situaciones de peligro sufridas por este grupo de población altamente vulnerable.

Además, mientras que no se resuelven las causas de fondo,exigimos que se respete la Convención de los Derechos del Niño y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos que establece que los Estados tienen la obligación de NO detener a niños y adolescentes por su situación migratoria o la de sus padres bajo ninguna circunstancia, porque su privación de libertad por motivos migratorios es contraria al interés superior del niño. Lo anterior quiere decir que cada vez que un agente migratorio o fronterizo detiene a un niño o una niña incurre en una violación de Derechos Humanos.

Esto es así porque la detención tiene un efecto devastador sobre el desarrollo del niño. Estudios internacionales han comprobado que la detención de NNA provoca depresión, desesperanza, estrés postraumático, ansiedad, pensamientos suicidios y autoflagelación. Estos se reflejan en síntomas como insomnio, pesadilla, incontinencia nocturna, pérdida de apetito y signos de daño físico. Los efectos negativos de la detención en la salud física, emocional y psicológica de la infancia tienden a perdurar por varios, afectando a su desarrollo y proyecto de vida.

Por lo anterior, desde Fundar nos sumamos a la Campaña Global ¡Alto a la Detención de Niñ@s Migrantes! de Amnistía Internacional, que en colaboración con otras organizaciones civiles hacen entrega de más de 36 mil firmas exigiendo a los gobiernos de México, Estados Unidos de América, Guatemala, Honduras y el Salvador la adopción de medidas alternativas a la detención que cumplen con el interés superior del niño y permiten a los niños, niñas y adolescentes estar en libertad en la comunidad, junto con sus padres, familiares y/o tutores, mientras se resuelve su situación migratoria.

Así, exigimos la instauración de los sistemas de protección especial e integral para atender sus necesidades y la plena garantía de sus derechos en México, incluyendo el derecho al debido proceso y la asistencia jurídica en los procedimientos migratorios y de asilo.

Simone Haf

http://blogs.eluniversal.com.mx/weblogs_detalle21102.html