Es conocido que la tierra y el territorio en el que se asientan los pueblos indígenas en México, son ricos en biodiversidad, agua y minerales, y que ante tal riqueza el número de megaproyectos, como la minería, van en aumento. Conocido es también que la ambición por dichos recursos naturales, históricamente ha resultado en el desplazamiento, destrucción e incluso exterminio de muchas comunidades indígenas en América Latina.*
A diferencia de la visión no indígena, para los pueblos originarios, la tierra, el territorio y sus recursos naturales, no son una mercancía sino la fuente de la vida misma, base no sólo de su subsistencia económica, sin...