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La participación ciudadana es lo de hoy

En los años recientes, en nuestro país ha habido diversos avances en el tema de la transparencia presupuestaria tanto a nivel federal como local. En 2010 por ejemplo, se publicó el primer presupuesto ciudadano a nivel federal, documento creado para explicar a los ciudadanos, con lenguaje claro y sencillo, los montos, destino, acciones, de los ingresos y egresos del gobierno en un año determinado. En 2011 se creó el portal de transparencia presupuestaria, sitio web que contiene información detallada sobre la evaluación de los programas públicos, recursos federales transferidos a los estados, entre otros. Así mismo, a nivel local con la aprobación de la Ley General de Contabilidad Gubernamental en 2008 y su posterior reforma en 2012, se sentaron las bases para homologar la información que presentan los diferentes niveles de gobierno en México.

La publicación de información sobre los ingresos y gastos del gobierno es un paso, importante sí, pero no suficiente. Una vez que existe información disponible ésta debe monitorearse y utilizarse para mejorar la calidad las obras de infraestructura, aumentar los impactos de los programas públicos que benefician a la población, generar la rendición de cuentas como cultura, prevenir y combatir la corrupción, entre otros. Es ahí donde la participación ciudadana juega un papel fundamental, ya que, es a través de ella que se le da uso a la información disponible. Tanto por parte de organizaciones de la sociedad civil, como académicos, ciudadanos comprometidos se requiere que la información gubernamental se analice y en base a eso se generen opiniones, recomendaciones, demandas que sirvan de contra peso a las decisiones de los actores que ostentan el poder.

La Iniciativa Global para la Transparencia Fiscal (GIFT por sus siglas en inglés) presenta evidencia sobre las prácticas e impactos de la participación ciudadana en temas presupuestarios en el caso de tres países: Corea del Sur, Brasil y Filipinas ¿Qué se está haciendo en otras partes del mundo? ¿Cuáles han sido los resultados? ¿Cómo se vincula la transparencia presupuestaria con la participación ciudadana?

En Corea del Sur, el modelo de participación se ha enfocado en personas expertas en los temas presupuestarios y políticas públicas. Se trata de la facultad universitaria, científicos y líderes de organizaciones no gubernamentales (ONGs), que a través de su análisis técnico proveen de fuentes alternativas de conocimiento y así, funcionan como un balance de opinión ante la poderosa burocracia gubernamental que caracteriza a este país. Se escuchan otras voces con capacidad de debate y argumentar, no solo lo que dice el gobierno. En contra parte, la participación directa del público en general ha sido bastante limitada.

En Brasil el proceso ha sido distinto. El objetivo principal ha sido darle voz tanto a organizaciones de la sociedad civil (OSC) como a los ciudadanos comunes y corrientes sobre las políticas públicas especialmente a nivel local. Se han utilizado diferentes mecanismos: presupuesto participativo, consejos ciudadanos, conferencias, entre otros. La evidencia en este país señala que el presupuesto participativo, por ejemplo, ha tenido un efecto redistributivo y puede contribuir a que se asignen recursos públicos a regiones más pobres y con ello mejorar la provisión de servicios públicos. En concreto, investigaciones realizadas sobre el caso de Brasil demuestran que la adopción de un presupuesto participativo (donde la población o comunidad consultada exprese cuáles son sus prioridades) ha generado aumentos el gasto público en salud y reducciones en la tasa de mortalidad infantil.

En Filipinas se ha utilizado la participación ciudadana con el propósito, entre otros, de mejorar la calidad de gobierno, en específico para disminuir la corrupción. Las organizaciones de la sociedad civil han empezado a utilizar la controlaría ciudadana para monitorear la corrupción y la calidad de implementación de los proyectos públicos. En Filipinas, la constitución establece explícitamente la figura de la participación ciudadana.

La participación de la ciudadanía en el proceso presupuestario es relevante. Sirve para informar a los ciudadanos y OSC lo que está haciendo el gobierno con los recursos públicos; para recibir retroalimentación ciudadana sobre los programas de los cuales serán beneficiarios; para empoderarlos a tomar decisiones; para que colaboren en detectar si un proyecto está funcionando o no; para evaluar la calidad de los servicios públicos. Además, la participación ciudadana, en cualquiera de sus formas, es necesaria para asegurar la calidad de la información sobre gastos e ingresos públicos, entre otras variables, y evitar así tener lo que Daniel Kaufmann, presidente del Natural Resource Governance Institute llamó: una transparencia zombie, información que en realidad no sirve de nada, no te dice nada. Organizaciones de la sociedad civil, gobiernos, organismos internacionales tenemos que continuar trabajando para generar información de los impactos y beneficios que la participación ciudadana puede tener, creando consciencia de su importancia y generando espacios para que ésta exista en nuestro país.

Para mayor información sobre la evidencia en los tres países ver: Brian Wampler, “Participation, Transparency and Accountability in South Korea, Brazil, and the Philippines”, GIFT

Liliana Ruíz

http://blogs.eluniversal.com.mx/weblogs_detalle20863.html