Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Los fracasos del campo mexicano

El presupuesto creciente del Programa Especial Concurrente (PEC) no ha impactado positivamente en las condiciones socioeconómicas y productivas del sector rural. En el período 2003-2013 el presupuesto creció 170% (Robles: 2013)[1] mientras la medición de la pobreza por ingresos en sus tres dimensiones reporta una mejoría no mayor al 4% y una ligera pérdida en el ingreso de la población rural (CONEVAL: 2013)[2].

La política hacia el sector rural tiene una orientación social y no productiva. En 1,570 municipios son más importantes los recursos de SEDESOL, mientras que en 358 predominan los de SAGARPA. Lo anterior se observa también en las zonas marginadas. En los municipios de Muy Alta marginación, del presupuesto ejercido, 67.7% correspondió a la vertiente Social y sólo 24.3% a la vertiente de Competitividad. En los municipios de muy Baja Marginación la relación fue de 26.2 contra 25.8 por ciento. Por su parte, en los municipios Indígenas se destinó el 68.3% del presupuesto de la vertiente Social y sólo el 23.8% de la vertiente de Competitividad. Se pretende combatir la pobreza sobre la base de programas asistenciales y no generando mejores ingresos y empleo a partir del estímulo a las actividades.

Captura de pantalla 2014-08-19 a la(s) 11.06.03 a.m.

Captura de pantalla 2014-08-19 a la(s) 11.05.55 a.m.

Captura de pantalla 2014-08-19 a la(s) 11.05.44 a.m.

[1] Robles Berlanga Héctor. 2013. El Presupuesto Especial Concurrente para el desarrollo rural y su comportamiento histórico 2003-2013. P 8, 18. Subsidios al campo.

[2] CONEVAL 2013. Pobreza 2012, Resultados de pobreza a nivel nacional y por entidades federativas 2010-2012. México. CONEVAL.