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¿Gobierno Abierto sin justicia social?

Esta semana tendrá lugar el Encuentro Regional de las Américas de la Alianza para el Gobierno Abierto (AGA) en San José, Costa Rica. Durante dos días, 18 y 19 de noviembre, se reunirán representantes de gobiernos, organizaciones, académicos y desarrolladores de los 17 países de las Américas que forman parte de esta plataforma -y otros que no se han integrado formalmente- para discutir y reflexionar sobre los avances, retos y desafíos de la región en materia de Gobierno Abierto.La AGA es una iniciativa lanzada en septiembre de 2011, actualmente integrada por 64 países, que promueve el diálogo y la colaboración entre sociedad civil y gobierno a favor de la transparencia, la rendición de cuentas, la participación ciudadana y la innovación tecnológica. México es uno de los ocho países fundadores de la AGA y desde septiembre de este año ocupa la presidencia por periodo de un año.

A diferencia de otros eventos de la AGA que se han realizado en años anteriores, este encuentro sin duda será complicado para México. La crisis de inseguridad y violencia que vive el país, que se muestra a través de hechos como los acontecidos en Tlataya, Estado de México o Ayotzinapa en el estado de Guerrero, pone de manifiesto la incapacidad del Estado mexicano para garantizar la paz y la seguridad de sus habitantes y para informar adecuadamente y rendir cuentas sobre sus acciones.

El Gobierno mexicano asiste al Encuentro Regional de San José como presidente de la AGA sin tener respuestas claras y precisas para las familias y para la sociedad mexicana sobre el paradero de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa a más de 50 días de su desaparición. Asiste a esta reunión en medio de fuertes cuestionamientos de parte de grupos y sectores amplios de la sociedad que se han manifestado de múltiples formas para elevar muestras de solidaridad con las familias, pero sobre todo para exigir al Estado mexicano que cumpla con su deber.

Es innegable que el Gobierno Federal, el Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI) y el grupo de organizaciones que participan en la AGA desde hace tres años, ha destacado en su buen trabajo en cuanto al diseño y estructura de esta plataforma. La conformación de un órgano de gobierno tripartita para dirigir la iniciativa, la metodología para la construcción del segundo plan de acción 2013 – 2015 y el tablero en línea lanzado la semana pasada para dar seguimiento a los compromisos, son acciones importantes.

Sin embargo, son acciones vacías si no se acompañan del cumplimiento de los compromisos pendientes del plan de acción anterior y los compromisos de este plan, sobre todo aquellos que podrían servir para prevenir la desaparición forzada (compromiso no. 4: registro de personas detenidas) y para conocer la magnitud del problema y actuar en consecuencia (compromiso no. 5: registro de personas desaparecidas).

Paradójicamente, estos compromisos relacionados con seguridad y justicia y tres más, relacionados con petróleo (compromiso no. 22) y minería (compromiso no. 23) e industrias extractivas en general (compromiso no. 26), fueron los únicos que no presentaron resultados en la reunión de presentación de avances que se realizó la semana pasada. El resto de compromisos son importantes y desde las organizaciones daremos seguimiento puntual a su cumplimiento, pero en el contexto actual, con la implementación de la reforma energética y la crisis de inseguridad y violencia que vive el país, estos 5 compromisos son las más relevantes y tendrían que mostrar avances significativos.

Sin justicia social no se puede avanzar hacia la construcción de un gobierno abierto. El gobierno mexicano debe cumplir con los compromisos asumidos en este plan y en el plan de acción anterior para honrar su palabra y contar con la legitimidad necesaria para presidir la AGA. Debe también garantizar la búsqueda en vida de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, así como asegurar verdad, justicia y reparación para las víctimas. Y sobre todo, debe recordar que el compromiso con el Gobierno Abierto, va más allá de una plataforma como la AGA, pues esta no se puede desvincular de la realidad nacional. Si el Gobierno Federal no practica los principios del Gobierno Abierto en cada una de sus acciones, la Alianza para el Gobierno Abierto no será más que una simulación.

Haydeé Pérez

Este contenido ha sido publicado originalmente por SINEMBARGO.MX en la siguiente dirección: http://www.sinembargo.mx/opinion/18-11-2014/29202.