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¿Podemos aprender de otras regiones?

Si alguien nos dijera que América Latina y África tienen muchos aspectos en común, estoy segura que nuestra primera reacción sería de asombro y de incredulidad. En efecto, se trata de dos regiones que geográficamente están alejadas y que ha influido en el poco conocimiento que tenemos los latinoamericanos en conocer sobre el pasado, y los desafíos que enfrentan los países africanos.

No obstante, si nos sentimos curiosos y nos interesamos en lo que está pasado en la región de África nos podemos encontrar con muchas sorpresas. La primera es que nos daríamos cuenta que ambos continentes compartimos desafíos similares para el fortalecimiento de la democracia sustantiva, es decir, en lograr que los gobiernos sean transparentes, en impulsar la participación de la ciudadanía y el respeto de los derechos humanos. La segunda es que dentro de cada una de las regiones, es posible observar experiencias distintas que han logrado avanzar hacia la consecución de este objetivo. Entonces, si tenemos obstáculos similares e identificamos ejemplos destacados, ¿por qué no compartirlos entre ambas regiones?

Precisamente, esta reflexión es la que ha impulsado la participación de Fundar en el Proyecto: Evidencias y Lecciones desde América Latina (Proyecto ELLA por sus siglas en inglés). El objetivo es fomentar el intercambio de estas experiencias en diversos temas y ámbitos entre estas regiones, denominadas del sur global, para que puedan servir de base en la elaboración de políticas públicas.

En ese contexto, Fundar está participando junto con el Centro de Estudios de Género de la Universidad de Ghana en un estudio sobre la violencia contra las mujeres ya que constituye un grave problema público que afecta a más del 40% de las mujeres en México y más del 20% para el caso de Ghana. Si bien ambos países han ratificado la Convención sobre la Eliminación de todas las formas de discriminación contra la Mujer (CEDAW), cuentan con Leyes para Atender la Violencia contra las Mujeres que fueron publicadas en el 2007, y que el Estado ha adoptado numerosas respuestas para atender este fenómeno, la realidad es que la información que permitiría identificar aquellas acciones que han funcionado, es muy escasa.

Tanto CEGENSA como Fundar han mostrado interés de colaborar en este proyecto con la elaboración de una investigación rigurosa sobre la violencia doméstica en ambos países y los impactos que los servicios de protección han tenido en las mujeres que han sido sobrevivientes de este tipo de violencia como una forma de contribuir a la atención y reflexión de las posibles soluciones a dicho problema.

En una segunda etapa de este proyecto, se busca que los resultados que arroje la investigación sean tomados como insumos del programa de intercambio y de aprendizaje entre académicos, estudiantes, investigadores, tomadores de decisiones, organizaciones de la sociedad civil y demás personas interesadas en el tema. Con la ayuda de las tecnologías de la información, compartiremos estas reflexiones a través de una plataforma en línea, videoconferencias, webinars, etc. que facilite confluir las distintas visiones y perspectivas sobre este tema.

Además de fomentar las discusiones de diversas perspectivas, se trata de descubrir otras formas, creativas y a partir de los contextos locales, para pensar en opciones que las regiones de América Latina y África pueden compartir.

Cecilia Toledo Escobar

http://www.publimetro.com.mx/trapitos-al-sol/podemos-aprender-de-otras-regiones/mofi!6M8NxTgXFbZm2/