En México no existen mecanismos claros para informar a la ciudadanía acerca de la asignación y aplicación de los recursos públicos, favoreciendo con ello que éstos sean utilizados en ocasiones, de manera discrecional y con objetivos distintos para los que fueron destinados.
En 1994, Alianza Cívica estableció el programa “Adopte un Funcionario” el cual se desarrolló en dos vertientes:
a) La recuperación de información sobre la forma como se manejaban los presupuestos públicos y,
b) La utilización de medios jurídicos para obligar a los funcionarios a que entregaran información sobre la forma como se gastaban los recursos, o los ingresos que obtenían.
Durante 1999 Alianza Cívica, en colaboración con FUNDAR, impulsó el proyecto “Análisis y Seguimiento de Presupuestos Públicos y Generación de Propuestas Ciudadanas” en Yucatán, Nuevo León y a nivel Federal, enfocado al Ramo 33 y de manera especial al Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS) y al Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de los Municipios (FORTAMUN), con la intención de conocer cómo se están aplicando los recursos y elaborar propuestas ciudadanas para su optimización.
Los resultados obtenidos evidencian un vacío normativo en la estructura del FAIS, lo que da un amplio espacio para el uso discrecional de los recursos de este fondo y, por consiguiente, una falta de transparencia en su manejo. Otro aspecto importante es que aun cuando en la Ley de Coordinación Fiscal se establece la participación ciudadana como uno de los elementos de operación de este fondo, no existen mecanismos claros para que esta participación se concrete.
